Bien, amigos. Adelante con
Parsifal , el sacrosanto festival wagneriano :
El genial Parsifal de 1951, con una pareja protagonista insuperable : Windgassen y Mödl. Con una gran dirección orquestal, por el mejor traductor de la obra, Knappertsbusch.
De nuevo Kna, en 1962, con un sonido como si estuvieramos viéndola, en vivo y en directo, y además con un Gurnemanz histórico : Hans Hotter. London repite su genial amfortas, y contamos con dos bajos de lujo : Talvela como Titurel y Nedlinger como Klingsor. Discreta, pero muy cumplidora pareja protagonista.
El mejor Parsifal fuera de Bayreuth, con el lujo del Hotter de Titurel, la sensual Kundry de Ludwig, el dramático Amfortas de DFD, el bueno de Frick como Gurnemanz, y una Filarmónica de Viena entregada a la obra.
Una alternativa al Bayreuth de Kna: el dinámico Parsifal de Krauss, con grandes voces de la época,y con un Vinay que no desentona tanto del resto de gigantes.
El parsifal de Waltraud Meier. El tercero de la diva, y el primero en estudio de Jerusalem y Barenboim. Si bien está a escalones de los anteriores, vemos aquí en su esplendor a la Kundry de nuestros días : Waltraud Meier, con una Barenboim grandioso, y un reparto de lo mejorcito de la época. Un verdadero oasis de belleza en la gran crisis wagneriana de los 80.