Estupenda noche la de ayer con una representación de un buen nivel general (sin llegar a lo excelso) y la compañía del amigo @lmaviv@ y mi querido Gato Montés, un lujo.
Poco que añadir a lo ya comentado. Escenografía sencilla pero preciosa, vestuario adecuado y una muy buena iluminación que contribuyeron a crear un ambiente adecuado a la obra. La orquesta con un sonido maravilloso bien dirigida por Abbado (aunque abusando del forte) y el coro cumpliendo sin más. Precioso por cierto el aire tenebroso que dio a la locura el artilugio ideado por Donizetti, me encantó.
Y sobre el escenario hubo un tutti fruti. Nadie discute que la Pratt tiene una espléndida técnica vocal, pero ayer al menos empezó muy reservona, fría y distante, y fiándolo todo a la escena de la locura que, siendo buena, no me llegó a emocionar, con unos agudos finales mejorables, pero tal vez es que soy excesivamente exigente cuando tengo a una estrella delante, y ella no me transmitió en demasía. Su amado Edgardo lo cantó Shi, tenor de voz cálida sobre todo en la zona media pero que pecó de lo mismo que la Pratt , aunque fue de menos a más y pese a su escaso volumen terminó cantando a buen nivel las arias finales.
Desacertado aunque voluntarioso Alesandro Luongo como Enrico (de largo lo más flojo del cast), grande Vinogradov con su voz de bajo rotundo como a mí me gusta aunque como buen eslavo carente de matices en este repertorio (debe mejorar este aspecto para dar el salto definitivo al olimpo operístico) y solo correcto Alejandro del Cerro como Normanno.
Y... ojito con los tapados de la velada, porque tanto la mezzo Olga Syniakova como el imberbe (lo digo con cariño por su juventud) Xavier Anduaga, apuntan muy buenas maneras. La primera tuvo el descaro de merendarse a la Pratt en la escena del manantial, y el segundo aprovechó al máximo el escaso rol de Arturo con una musicalidad apabullante y un bello timbre.
Y por último, coincido con los compañeros en que lo mejor fue el sexteto, con todas las voces perfectamente empastadas y que cosechó una de las ovaciones más rotundas y sentidas que he escuchado últimamente es Les Arts. En definitiva, lo pasamos bien
Por cierto queridos Tunner y José Luis, os admiro hasta la devoción en cómo sois capaces de recordar la partitura de una obra y saber qué partes se omiten!! Éste sería un buen tema a comentar en las representaciones que croniquemos. Y por favor, animaros a venir que últimamente hay unos preocupantes huecos en la sala pese a la popularidad de lo representado.