6. PERSONAJESTras los personajes reales, vamos por los ficticios, los de la ópera.
He procedido a la escucha atenta de todos ellos, varias versiones, anotando sus matices, su tesitura... Hasta me he vestido como ellos, aprovechando las rebajas, para introducirme en sus roles e indagar así en sus perfiles sicológicos y dramáticos... Han sido horas de duro trabajo.
Lo único que he sacado en claro es que se llama
Nabucco porque el resto del nombre llevaba a confusión sobre su sexo: no sabían si era un señor o una monja. Así que al final, he optado por "yernear" un poco y sacarlo de Internet. Hay que aprovechar la tecnología.
Bueno, ya en serio y a veces en sirio, cinco son los personajes principales de esta ópera:
Nabucco o Nabuccodonosor: Rey de Babilonia, padre de Abigaille y de Fenena, aunque de la primera con una esclava y de la segunda con la reina, se supone. Su cuerda es la de
barítono, una de las más lucidas del repertorio. Aunque es el que da nombre a la ópera, su presencia es menos habitual de lo esperado aunque muy efectista. Su límite agudo es sol
3. Tiene momentos en que su voz ha de sonar poderosa y autoritaria, digna del gran dominador del mundo, junto con otros de arrepentimiento y súplica, en ocasiones humillante. En el estreno milanés lo interpretó Giorgio Ronconi. No sabemos si se quedó como su apellido.
Abigaille: Hija bastarda de Nabucco con una esclava, hermanastra de Fenena y aspirante al trono de su padre. Papel tremendo para una
soprano dramática de coloratura, con saltos de escala criminales, agudos imponentes (do
5) y graves importantes (si
2), más de dos octavas. Siempre de mal humor y exasperada, salvo en el final. Una de las causas por las que esta ópera no se representa más. No es fácil encontrar sopranos que quieran hincarle el diente y las que lo hacen, salvo que quieran quedar áfonas, abandonan en unos años. Papel estrenado por Giuseppina Strepponi, más tarde esposa de Verdi.
Zaccaria: Sumo sacerdote de Israel (aunque yo creo que debería serlo de Judá).
Bajo de gran estatura
musical, ya que por abajo alcanza el fa
#1 y por arriba dos octavas más (fa
#3). También debe sonar imponente, porque es el que conduce a su pueblo en el exilio, enfrentándose al Rey. No es fácil encontrar un buen intérprete. Tiene dos arias magníficas. El primero en la historia fue Prosper Dérivis.
Fenena: Hija legítima de Nabucco y sucesora natural al trono, odiada por ello por su hermanastra. Su relación de amor con el hebreo Ismaele crea una interesante historia en segundo término, parecida a la de Aida con Radamés, que hace menos lineal la trama. Papel para
mezzosoprano, aunque a veces se le confía a una
soprano lírica, ya que tiene que llegar al la
4. Por abajo, si
2. No es un rol muy extenso, participa en tercetos y concertantes, aunque al final tiene una pequeña aria protagonista. Lo estrenó Giovannina Bellinzaghi.
Ismaele: Hebreo con las hormonas a flor de piel que se enamora de Fenena hasta las cachas sin importarle nada más. Vamos, como Orlando Bloom en
Troya, aunque un pelín más valiente. Es un papel poco protagonista para
tenor lírico, de ahí que tradicionalmente no lo interpreten grandes voces, lo que en ocasiones desluce el resultado final. Su extensión es importante, del si
1 al si
b3. ¿Sería bueno el de Corrado Miraglia?
El resto de personajes, el Gran Sacerdote de Baal (bajo), Anna (hermana de Zaccaria, soprano) y el oficial Abdallo (tenor) no tienen mucho relieve, aunque participan en los momentos corales.
Sí, sin embargo, lo tiene el
coro, no sólo en el famoso "Va pensiero" que en Italia es norma bisar, sino ya desde el principio de la ópera, y en varios pasajes como los finales de dúos, cabaletas o actos. Como las primeras obras de Verdi, es una ópera muy coral.
La
orquesta, claro, también es muy importante. Consta de los habituales instrumentos de cuerda (violín, chelo, viola, contrabajo, suegra...), además de flautín, dos flautas, dos oboes, cuernos inglés, dos clarinetes, dos fagotes, cuatro trompas, dos trompetas, dos trombones, trombón bajo, timbales, bombo, platillos, tambor, triángulo y dos arpas. Su gran momento es la magnífica obertura. El director del estreno fue Eugenio Cavallini.
En breve empezamos con los actos y momentos musicales, que os veo inquietos.