1.2 Maeterlinck, el dramaturgo
Maurice MaeterlinckLa fama que disfrutó en vida, una destacada influencia en sus colegas de oficio y hasta el premio Nobel de Literatura concedido en 1911 no han bastado para salvar de un considerable olvido al autor de la obra de teatro
Pelléas et Mélisande.
Maurice Maeterlinck (Gante, Bélgica, 1862 - Niza, Francia, 1949) fue un importante dramaturgo, poeta y ensayista francófono belga, no sólo admirado en su día por sus creaciones literarias sino también por las ideas filosóficas de sus ensayos.
Hijo de una acomodada familia burguesa de Gante, su infancia estuvo marcada por las afición del padre a la apicultura y los cultivos de invernadero (
Los invernaderos sería el título de su primer libro de poemas, y entre sus ensayos se encuentran por ejemplo
La vida de las abejas y
La inteligencia de las flores) y por la sombría vegetación e inquietantes paisajes brumosos que rodeaban la ciudad, un paisaje que nos encontraremos casi como un personaje más en la ópera y que rodea opresivamente el castillo del rey Arkel.
En ese entorno un tanto depresivo tampoco ayudaría la educación recibida en un severo colegio jesuita, donde no se enseñaba música y la literatura romántica francesa estaba prohibida. Charles van Lerberghe, otro escritor simbolista que compartiría colegio con Maeterlinck, recordaba posteriormente cómo todos los años recibían un sermón sobre la muerte, educándolos en el temor de Dios, y contándoles casos de muerte repentina en los que muchachos jóvenes inesperadamente caían fulminados en estado de pecado mortal y eran enviados a las llamas del infierno. Probablemente esto influyó en la recurrencia de la muerte y el sentido de la vida como temas centrales en la obra de Maeterlinck.
Siguiendo los deseos de su padre, estudió derecho. Sin embargo en una corta estancia en París tras sus estudios entró en contacto con varios miembros del moviemiento simbolista, como Mallarmé y Villiers de l'Isle-Adam, y decidió abandonar las leyes por la literatura. Tras la publicación de su primer libro de poemas, consigue un gran éxito con su primera obra de teatro,
La princesse Maleine. Esta obra inaugura la primera serie obras de teatro simbolistas de Maeterlinck, a la que pertenecen también
Pelléas et Mélisande y
Ariane et Barbe-Bleue.