El recital de Oviedo fue en la sala principal del Auditorio, ayer día 30 de Noviembre. Con Albelo actuó la soprano Milagros Poblador, y acompañó a ambos cantantes el pianista Juan Francisco Parra.
No había tenido ocasión de escuchar al tenor hasta el momento, ya que en Asturias no hubo por su parte más que cancelaciones. Con toda la curiosidad del mundo, y de manera objetiva, me dispuse a oír el programa que interpretó en este homenaje al gran Alfredo Kraus, con una primera parte dedicada sobre todo a la ópera, y diversas canciones en la segunda (siento no tener delante el programa de mano, y no quisiera cometer algún error).
Albelo incluyó números como "Spirto gentil", "Quant'é bella, quant'é cara", el precioso "Lamento di Federico", y también romanzas de zarzuela, como "Por el humo" ó la difícil jota de El trust de los tenorios.
Y vamos a ello. Dije, y repito, que fui al recital con una actitud positiva y objetiva. Si jamás he abucheado a un cantante, por muy mala que fuese su actuación, de más está decir que no voy con predisposición en contra de alguien a quien no he escuchado. Tout simplement, escucho con atención y juzgo después. Lo digo por si alguien piensa que ya iba con la idea de armar jaleo. Para nada.
En Albelo hay material. Y esto ha de tomarse de la manera más literal posible: la materia prima existe, pero aún ha de trabajarse y no poco. La voz es hermosa, con un timbre grato, con volumen y agudos muy bellos. La dicción es clara, así como la articulación. Sí aprecié ciertas dificultades en los pasajes donde tenía que apianar, pero creo que el balance es positivo para las cualidades naturales del tenor. Pero si este es el haber, llega el debe: lo siento, pero es un cantante SOSO. No se me ocurre otro calificativo para lo que escuché ayer. Puede que no todos los compositores, épocas y estilos se ajusten igual de bien a las características de un cantante. Pero es que en el variado muestrario que incluía el programa del recital, todo fue igualmente plano, soso, con poca vida. Por un momento, pensé si Albelo es de los cantantes que prefieren la escena y los recitales les saben a poco. Pero enseguida vi que no era esa la cuestión. Es soso, lo siento, es incapaz de sentir y expresar en su canto lo que el texto dice. Las canciones napolitanas de Tosti, en especial la preciosa "L'ultima canzone", podían tener como letra la lista de la compra, porque daba igual. Lo mismo sucedió con "Granada", en la versión más desangelada que he oído nunca. En las arias de ópera sucedió lo mismo: las dio todas en el "Spirto gentil", pero no profundizó en la expresividad requerida, el "Quant'é bella, quant'é cara" careció del punto de gracia mezclado con melancolía que hubiese sido necesario, y en el "Lamento di Federico" ese desgarro verista que requiere la bellísima frase final "Mi fai tanto mal, tanto mal!" brilló por su ausencia. Por otra parte, todas sus intervenciones resultaron fragmentadas, a trozos, sin una concepción general de cada una de las arias, canciones y romanzas interpretadas. Iba frase a frase, sin transmitir nunca la sensación de unidad de cada uno de los números, sin que pudiese apreciarse un clímax musical ni dramático en cada pieza, que se componía como de frases sueltas, sin continuidad. Por otra parte, Albelo estuvo todo el recital demasiado pegado a la partitura, algo envarado, y ¿no habrá un alma caritativa que le diga que lo de dejar una manita apoyada en el piano hace mucho tiempo que ya no se lleva? Le harían un gran favor.
De Milagros Poblador prefiero no decir nada, o lo menos posible. El agudo es completamente gritado, los finales de frase, tragados y ensordecidos, el centro apenas está colocado… y desgranó una serie de números a cual más difícil, comenzado por un irreconocible "Tornami a vagheggiar" de Alcina (¡pobre Haendel!). Agradezco que haya incluido una romanza de El húsar de la guardia, que no conocía, pero sólo por ese motivo.
La respuesta del público en este recital fue muy calurosa. Mis impresiones fueron las recogidas en las líneas precedentes. Albelo podrá llegar lejos en su carrera, pero aún le queda mucho por profundizar.
_________________ Bella tu sei, tu sei gioconda
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