Pues Ricardo:
Según mencionas, alguien dijo que si se pide un fortissimo, la orquesta tendrá que tocar forte, si se pide forte, deberá hacerlo en mezzoforte, y así sucesivamente... pero en el caso de la voz, por simple lógica ha de ser distinto. En cantidad y materia sonora, 20 primeros violines son mucho más que una soprano ligera o bien, una lírico ligera, a eso súmale la voz del bajo, y después la de la mezzosoprano (o contralto, según sea el caso), y ¿qué obtienes? Pues concluyo que así como que la orquesta debe tocar forte cuando se pide fortissimo, la (o el) cantante deberá cantar fortissimo cuando se pide forte en estos casos. Nadie a dicho que una ligera no pueda cantar Gilda, pero la pregunta más apropiada seria: ¿Cuántas Gildas podrá cantar esta ligera sin perjudicar su voz que la puede dejar fuera para siempre? La voz es muy delicada. Como una vez dije, Carreras casi se daña para siempre la voz por cantar un Radamés.
Verdi no quería de Rigoletto una obra de cámara. El drama domina un elevado porcentaje de pasajes en la obra. La orquesta podrá ser, en número, igual que la de Don Giovanni, pero no así la orquestación. Verdi era, para componer mucho más intenso que Mozart o Donizetti, tomando en cuenta que siempre se le criticaba lo de músico vulgar, bueno para escribir fanfarrias...
Verdi mismo consideraba los cantantes para los que hacía los roles, ¿acaso no es la que estrenó Gilda (no me recuerdo el nombre ahora
) la misma que estrenó Leonora del Trovatore? El mismo Verdi decía que prefería al cantante mejor actor que buen cantante, el conocía sus obras.
La cuestión aquí, creo, no está en tapar o no tapar, sino en que la cantante debe cumplir con los requisitos técnicos del rol. Y una ligera no debería poder con una Gilda.
Saludos