Voy a estar un par de díitas fuera, pero para no dejaros con
las ganas, dos audiciones.
La primera, por petición de Tunner,
Clavelitos, de Joaquín Valverde. Si ayer Bori nos vendía violetas, hoy Supervía nos regala (es un decir) claveles,
pa' los churumbeles
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Y la segunda, por no perder la conexión que prometí con Rossini, una
preciosa habanera (popularizada después por otros muchos cantantes), compuesta por el músico alavés Sebastián de Iradier a mediados del siglo XIX, y estrenada (y ahí viene la conexión
) por la grandísima contralto rossiniana Marietta Alboni, de la que hablaremos en unos días
Os dejo con
La Paloma:
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Lo que daría por que Supervía hubiera vivido para cantar las
Cinco Canciones Negras de Montsalvatge