Que se programe un título "experimental" o nuevo, puede resultar admisible, aunque no desde el punto de vista de la ausencia de títulos esenciales que áun no se han visto en el Real pero....
Una vez conocidos los 11 títulos de la temporada próxima (que NO tengo permitido desvelar), he de decir que me parece de vergüenza ajena, no entiendo cómo las autoridades pueden aprobar esa temporada (que sumada a la actual suponen la preterición de un siglo esencial de la historia de la ópera y el virtual destierro de la ópera italiana en el Real) y no me extrañaría la desaparición de más de un 50% del abono.
Se vuelven a programar obras repetidas que no tiene sentido porque no se sostienen en una propuesta canora (algo que no interesa al Sr. Mortier) ni musical que lo justifique.
Dos temporadas seguidas sin Verdi ni Wagner y el exilio ya casi tradicional del bel canto romántico en el Real junto con una serie de títulos absolutamente periféricos (que se pueden dar uno o dos al año, pero no fundamentar temporada tras temporada en ellos) no puede sostenerse, porque sencillamente no se producen
en ningún teatro del mundo, ni siquiera en los supuestamente con público más "avezado" o "culto" o "dispuesto" alas novedades.
Este señor no puede manejar el teatro Real como un instrumento de sus personales gustos y de la promoción de sus librejos y su ego.
¡Cuánto dinero me voy a ahorrar!