Creo que hay una cierta confusión respecto al concepto "nuevos públicos".
Verán, en una serie de representaciones de una ópera en el Teatro Real se disponen de, pongamos, 20,000 localidades.
Es decir, que suponiendo un éxito completo, para los aficionados de Madrid, del resto de España y hasta alguno internacional, sólo existen 20,000 asientos. Como algunos de los miembros de este Foro compran para varias fechas, pues ni eso, en términos de número de oyentes distintos.
En la Comunidad de Madrid, andamos por encima de los 6 millones de habitantes.
Lo que quiere el señor Mortier, no es atraer más o menos al mismo pequeño porcentaje de aficionados a la ópera, que se va perpetuando a sí mismo en las últimas décadas, y que además todo nos autoriza a pensar que en estos tiempos, con el advenimiento de Internet, el aumento de las representaciones, la apertura del repertorio, grabaciones a "precio" ventajoso,... es capaz de crecer moderadamente, sin grandes problemas.
Ahora, si se desea saltar de 20,000 interesados a 200,000, hay que utilizar otros cebos. Esos peces no van a picar con cantantes locales, ni estrellas internacionales, ni con títulos memorizados por el Tato.
¿Esto es posible?. En caso afirmativo, ¿los espectáculos programados por el señor Mortier serán la llave para ello?.... Veremos, en mi opinión la respuesta a la primera pregunta es "Muy, muy difícil" y, a la segunda, "No".
Por eso, y para tratar siempre de sumar y no restar, es necesario el equilibrio en las programaciones, e involucrar al público "tradicional" (es decir, nosotros) a la vez que se busca, si se tiene el talento y el dinero necesario para ello, ampliar significativamente la base de aficionados al género. Desde este punto de vista, la temporada del señor Mortier está diseñada, a mi juicio, de manera singularmente desafortunada.