Salomé. Orígenes y composición
“
La mimesis puede llegar a tal extremo de repetir el mismo mito en muchas formas, y a lo largo de un amplísimo periodo de tiempo”
Extraído del
Segundo Libro de la Poética de Aristóteles, acerca de la comedia y la risa
1. La verdadera Salomé
2. La obra de Wilde, entre otras
3. La ópera de Strauss
1. La verdadera Salomé
La persona alrededor de la cual va a girar todo el mes de marzo fue un personaje histórico, alguien que, de creer las fuentes que lo tratan, vivió de forma casi contemporánea a Jesucristo. De hecho, son las
Sagradas Escrituras las primeras que nos ponen sobre la pista de alguien así, en dos citas evangélicas casi coincidentes, procedentes de los evangelios de
San Marcos y San Mateo
Mc 6,14-29 La fama de Jesús llegó a oídos del rey Herodes. Unos decían: "Ése es Juan Bautista, que ha resucitado y tiene el poder de hacer milagros"; otros decían: "Es Elías", y otros: "Es un profeta como los antiguos". Pero Herodes, al oír hablar de esto, decía: "Es Juan, a quien yo mandé cortar la cabeza, que ha resucitado". Y es que Herodes había detenido a Juan y lo había metido en la cárcel por causa de Herodías, la mujer de su hermano Filipo, que él tenía como esposa. Porque Juan le decía: "No te está permitido tener la mujer de tu hermano". Herodías odiaba a Juan y quería matarlo; pero no podía, porque Herodes respetaba a Juan, pues reconocía que era un hombre justo y santo, y lo protegía; cuando lo oía quedaba perplejo, pero lo escuchaba con gusto. Y llegó el día oportuno. Herodes ofrecía un banquete en su cumpleaños a los magnates, a los tribunos y a los grandes personajes de Galilea. La hija de Herodías en persona entró, danzó y agradó a Herodes y a los invitados. Entonces el rey dijo a la muchacha: "Pídeme lo que quieras y te lo daré". Y juró: "Te daré lo que me pidas, aunque sea la mitad de mi reino". Ella salió y preguntó a su madre: "¿Qué pido?". Su madre contestó: "La cabeza de Juan el Bautista". Corrió de nuevo a donde estaba el rey, entró y dijo: "Quiero que me des inmediatamente la cabeza de Juan el Bautista en una bandeja". El rey se entristeció mucho, pero no quiso desairarla por el juramento y por los invitados. Inmediatamente el rey mandó a un verdugo que trajera la cabeza de Juan. Él fue a la cárcel, le cortó la cabeza, la trajo en una bandeja y se la dio a la muchacha, y la muchacha se la dio a su madre. Sus discípulos, al enterarse, fueron, recogieron el cadáver y lo sepultaron.
Mt 14, 1-12 Por entonces la fama de Jesús llegó a oídos del virrey Herodes, el cual dijo a sus cortesanos: "Ése es Juan Bautista, que ha resucitado de entre los muertos, y por eso tiene poder de obrar milagros". Y es que Herodes había detenido a Juan, lo había encadenado y lo había metido en la cárcel por causa de Herodías, la mujer de su hermano Filipo; pues Juan le decía: "No te es permitido tenerla". Quiso matarlo; pero tuvo miedo del pueblo, que lo tenía por profeta. Al llegar el cumpleaños de Herodes, la hija de Herodías bailó en presencia de todos, y tanto agradó a Herodes, que juró darle lo que pidiera. Ella, instigada por su madre, le dijo: "Dame ahora mismo en una bandeja la cabeza de Juan Bautista". El rey se entristeció, pero por el juramento y por los invitados ordenó que se la dieran, y envió a cortar la cabeza de Juan en la cárcel. Trajeron la cabeza en una bandeja y se la entregaron a la muchacha, la cual se la llevó a su madre. Sus discípulos fueron, recogieron el cadáver y lo sepultaron. Fueron después a decírselo a Jesús.
Como podemos ver, las líneas argumentales maestras estaban ya expuestas por la tradición bíblica. Ahora bien, hay dos cosas que hemos de señalar: el carácter innominado del personaje y su actuación como instrumento de la venganza de su madre, Herodías.
Pero existe una
tercera fuente que nos ayudará a perfilar el personaje histórico de Salomé, que es la obra
Antigüedades Judías, del historiador judeoromano del siglo I
Flavio Josefo. Éste va a darle nombre a la hija de Herodías: Salome, princesa idumea, hija de Herodes Filipo y Herodías, la cual, muerto éste, contrajo escandalosas nupcias con
Herodes Antipas, uno de los hijos de Herodes el grande (el de la matanza de los inocentes del relato bíblico). Este Antipas era hermanastro de Herodes Filipo, lo cual añadió el tinte incestuoso al segundo matrimonio de Herodías, y convirtió a Antipas en padastro de Salomé y Tetrarca de Judea, al heredar los dominios de Herodes Filipos (ver figura Infra)
Pero será la posteridad la que haga de la princesa Salomé alguien importante, no un mero instrumento de la perversa Herodías. Y eso es materia del siguiente capítulo