Ahí van unas notas biográficas y un breve comentario del libro y de su autor.
Henry James:
Escritor estadounidense expatriado, cuya narrativa magistral aúna la inocencia americana y la experiencia europea en una obra intensa y psicológicamente compleja. Henry, hermano menor del distinguido filósofo William James, nació el 15 de abril de 1843 en Nueva York. Estudió en Nueva York, Londres, París y Ginebra. En 1875, se estableció en Inglaterra y en 1915 obtuvo la nacionalidad inglesa. Recién cumplidos los veinte años comenzó a publicar cuentos y artículos en revistas de Estados Unidos.
La obra de James se caracteriza por su ritmo lento y la descripción sutil de los personajes, más que por los incidentes dramáticos o los argumentos complicados. Además, el choque entre su formación “a la europea” y su origen estadounidense otorga originalidad a su escritura.
Sus libros principales, modelos de la novela objetiva psicológica, tratan del mundo ocioso y afectado que conoció de cerca mientras vivió en Europa. En sus primeros relatos y novelas, James manifiesta el impacto que la vieja cultura europea causó en los americanos que viajaban o vivían en el viejo continente. Ejemplos de esta fase, escritos entre 1875 y 1881, son Roderick Hudson (1876), El americano (1877), Daisy Miller (1879) y Retrato de una dama (1881). Después exploró los tipos y costumbres del carácter inglés, como en La musa trágica (1890), Los despojos de Poynton (1897) y La edad ingrata (1899). En sus últimas tres grandes novelas, Las alas de la paloma (1902), Los embajadores (1903) y La copa dorada (1904), vuelve al esquema del contraste entre las sociedades europea y americana.
En general, el estilo de sus últimas obras es complejo, revelando oblicuamente los motivos y conducta de sus personajes por medio de sus conversaciones y a través de las observaciones minuciosas que se hacen entre sí. A pesar de que el diálogo significativo es característico de su estilo literario, sus obras de teatro fracasaron, aunque varias de ellas fueron dramatizadas o llevadas al cine con éxito, incluyendo dos de sus muchos relatos, Los papeles de Aspern (1888) y Otra vuelta de tuerca (1898), además de Washington Square (1881), una de sus novelas más famosas.
. Fue un autor prolífico y a lo largo de los 51 años de su carrera escribió 20 novelas, 112 relatos y 12 obras de teatro, lo que significa que publicó uno o más libros al año hasta el final de su vida. Su obra incluye, además de la ficción, un gran volumen de crítica literaria en el que pone de manifiesto su admiración por los novelistas George Eliot y Honoré de Balzac. La detallada descripción de la vida interior de sus personajes le convierten en uno de los precursores del monólogo interior y, por ende, de la novela contemporánea.
James murió el 28 de febrero de 1916, en su casa de campo de Rye, Sussex
Otra vuelta de tuerca (1898):
La novela breve se titula originalmente “The turn of the screw”...el origen del título me lo reservo para que lo busquéis en el propio libro (que bien merece una o dos o tres lecturas).
El argumento del libro es, prácticamente, el de la novela, pero, por supuesto, existen diferencias (como diferentes son los medios expresivos –novela y ópera- en cada caso).
La novela comienza con una reunión de amigos...allí uno de ellos, haciéndose el interesante, comenta que él conoce una historia de un horror inimaginable...una historia de niños y fantasmas.
Pues bien, tras hacerse de rogar, explica que él conoció a la protagonista de esta historia (que no es más que la institutriz) y que ella le había dejado dicha historia escrita de su puño y letra.
Tras la insistencia de los presentes, en otra jornada lleva el manuscrito y lo lee...dando comienzo a una de las novelas más apasionantes de todos los tiempos (dentro de la novela breve prácticamente insuperada –sin desmerecer a Pedro Páramo de Juan Rulfo o a “Los muertos” de Joyce- y dentro del subgénero de terror, la mejor sin duda alguna).
El resto de la novela es el relato en primera persona de la institutriz y todo lo que sucedió en Bly desde su llegada hasta el espeluznante final.
Si tienen tiempo y ganas (son Navidades, no tienen excusa) recuerden (
http://www.gratislibros.com.ar/LIBROS014.htm) Merece la pena.
En cuanto al estilo, lo alucinante de dicha novela es cómo está lograda la progresión dramática...los pensamientos de la institutriz, las digresiones, la sutilísima manera en la que James va haciendo pasar las cosas del mayor de los encantos al auténtico terror, el terror de verdad, el psicológico. Y aquí entra en juego la profunda ambigüedad de la obra...existen verdaderamente los fantasmas? O la institutriz se lo está imaginando?
Nada queda claro en la novela pero, digo yo, qué más da? Es acaso peor el terror de los fantasmas que el propio terror de la represión? (porque, ya veremos que es una historia cargada de implicaciones sexuales, afectivas y psicológicas)...si los fantasmas no existen, tanto peor, porque el infierno psicológico al que se estará sometido será sin duda superior. En efecto, quien se niegue a admitirlos como reales se adentrará en horrores todavía mayores, porque tendrá que admitir a otros fantasmas mil veces más terribles que pueblan ciertos infiernos inimaginables que acechan en nuestro espíritu.
Pero bueno, como introducción a la ópera ya he dicho demasiado...más información en tan apasionante libro! (es que no quiero profundizar mucho, que rompe el misterio del libro!!!!)