Permitidme hoy, con lo poco que escribo en este foro, un poco de autobombo, pero es que llevo riéndome desde hace un rato y TENGO QUE COMPARTIRRRRRLOOOOOOOOO.
Lo primero, mirad este enlace:
MUNDOCLASICO
Por si lo han editado, el pdf está aquí:
CLIC
Habla de la Malibrán y tal... y dedica un párrafo a la ópera
Zitronella da Ravello.
Pues bien. Esa ópera es ficticia, no existe y cualquiera que tenga dos dedos de frente e intente investigar sobre ella verá que sólo hay dos referencias a ella en internet.
Una está en mi blog de ópera, donde puse su
desquiciado argumento y su
inventada historia.
Y otra en mi blog petardo, donde agradecía a un amigo su contribución con las ilustraciones.
clic
La historia:
Estando de vacaciones en la costiera amalfitana con unos amigos, y después de maravillarons con el paisaje de Ravello y Amalfi, se nos ocurrió que bien podría ser el enclave ideal para una ópera belcantista.
Los limoneros de Ravello y el licor lemoncello de Amalfi nos dieron la clave. Nuestra heroína sería Zitronella, una campesina que todos los días baja de Ravello a Amalfi a vender los limones que recoge en su campito. por supuesto que tendría que haber un tenor ligero BOBO, que estuviera enamorado de ella sin saberlo, un viejo rijoso que la deseara y una mala, que decidimos que fuera alicantina y estuviera vestida durante toda la ópera como la Bellea del Foc y rivalizara con sus naranjas españolas. Clementina d'Alacant, por supuesto. Tendría que tener su escena de la locura y su final trágico: el terremoto que acabó con Amalfi.
Es lo que tenemos los aficionados a la ópera, que con cualquier tontería nos montamos una historia.
La cosa quedó en nada hasta que el año pasado se me vino a la memoria por una de esas asociaciones sinápticas estúpidas que suelen tener mis neuronas y plasmé el argumento de Zitronella en mi blog.
Para darle algo más de empaque, y con todo el rollo de la malibrán, la Bartoli y tal, inventé una supuesta leyenda negra sobre la ópera y bla bla bla.
Yo creo que cualquiera que tenga conocimientos operísticos se da cuenta al momento de que se trata de una parodia, pero parece ser que con poner unos pocos datos cronológicos, dos nombres y un sello discográfico que no es de los archiconocidos... LA COSA CUELA!!!
Y me pregunto yo: ¿se documentará el autor de este artículo tan bien para todos los demás que escriba? ¿Qué control existe en las publicaciones? ¿Debería presentarme esta noche en el Teatro Real a la función de Tamerlano con una camiseta que ponga TODOS SOMOS ZITRONELLA?
Me parto.
PS: Mientras escribía esto, me llama mi amigo totalmente descojonado de la risa exigiendo derechos de autor y reclamando la autoría de la idea original. Es verdad, lo de la Bellea fue idea suya.