Ya ha salido a la venta en España el último CD de Juan Diego Flórez “Arias for Rubini”. El disco recoge arias de óperas que fueron escritas para el legendario cantante Giovanni Battista Rubini, o en caso contrario, que posteriormente a su estreno fueron cantadas por el famoso tenor, siendo en algunos casos revisadas y rescritas introduciendo imposibles pasajes sólo al alcance de verdaderos fuera de serie. Se puede decir por tanto que además de un homenaje a uno de los cantantes más importantes de la historia, es el homenaje al tenor contraltino, al tenor belcantista más claro y luminoso y el homenaje a una época muy importante para la historia de la lírica donde se dilucidaron cuestiones claves para la técnica de la emisión de la voz.
Hay muchos factores que hacen que este registro en estudio sea de especial trascendencia. Para empezar el Cd muestra todas las cualidades de Juan Diego Flórez elevadas a la máxima potencia. La voz del tenor peruano se nos muestra en esta grabación con el mayor esplendor alcanzado en estudio, fresca, sana, con unos sobreagudos brillantísimos, emitidos de la forma más limpia, impulsados arriba con una facilidad pasmosa, siempre guardando la homogeneidad entre todos los registros. Los agudos son unos verdaderos diamantes mostrados con un atractivo vibrato y alcanzados siempre con unos ataques al corazón de la nota, en un ejercicio esplendoroso de afinación. La naturalidad del canto, el compromiso con el legato, el fraseo elegante, la ornamentación espectacular, configuran un refinado cóctel belcantista capaz de saciar los paladares más exigentes. La matización y expresión del cantante se encuentra muy mejorada como se puede comprobar en los exquisitos andantes más melancólicos. Quizás el único punto débil sea todavía unos graves un tanto ensombrecidos ante la brillantez de un mejorado registro central y un espectacular registro agudo.
Pero lo que hace verdaderamente único este Compacto es la conjunción de escuchar estas vertiginosas y dificilísimas arias interpretadas por un cantante que además de conseguir salvar con acierto los tremendos escollos de las partituras a las que ha de enfrentarse, lo hace con una voz verdaderamente atractiva y bella.
Por si fuera poco, el CD ofrece una primicia mundial al registrarse el aria de la Donna del lago de la versión de Paris de 1925 “Pace non trovo”, donde gracias a un estudio musicológico de Philip Gossett el tenor puede ofrecernos la mayor parte de las espectaculares variaciones interpretadas por Rubini.
Los 7 fragmentos de las 7 óperas seleccionadas están separadas en 23 cortes para separar recitativos, arias, cabalettas. Aunque es muy difícil destacar alguno de ellos ante la gran cantidad de excelencias que contiene este Cd, voy a resaltar algunos.
El corte 14 perteneciente al “All’udir del padre afflitto” perteneciente a la ópera Bianca e Fernando es cantado de manera sublime por Flórez. No hay palabras para describir la belleza con que se emplea el tenor. Además en este larghetto el tenor introduce por primera vez en una grabación un Mib4. No es el agudo que más nos gusta de la grabación pero ahí queda la espectacularidad de la nota emitida con total plenitud, sin afalsetamiento alguno, aunque se note que el sonido está ligeramente arañado.
Los cortes 17,18 y 19 pertenecen al aria mencionada anteriormente de la donna del lago escrita para la versión de Paris. La partitura reestablecida por Philip Gosset contiene por encima de la partitura para la voz de Uberto la escritura de las variaciones practicadas por Rubini que son de lo más difícil que se pueda ver en escritura vocal. Hay numerosas volatas resplandecientes que ascienden hasta el Re4 y 2 escalas ascendentes que llegan hasta el Mi4. Estos Mi4 no son emitidos por Juan Diego, pero en cambio el tenor el resto de la partitura propuesta para Rubini la atiende con mucha exactitud, incluida una espectacular fantasía de grupos ascendentes de tres semicorcheas con arribada al si natural agudo con calderón y trinos en tresillos.
El primero de los cortes es un allegro vivace “Pace non trovo oh ciel” que da paso al segundo, un precioso andante mosso “tu sorda ai miei lamenti” uno de los fragmentos que más me ha gustado del disco y que Flórez canta con una gran expresividad y una bella melancolía. El tercero el allegro “ Ah! Come nascondere” proviene su música de su ópera Ermione. Aquí las variaciones de Rubini son de absoluto vértigo, Flórez además de seguirlas, se permite incluir algunos adornos de su cosecha y la emisión de alguna nota una octava más alta, como un Do#3 que emite con pasmosa facilidad como un Do#4 en medio de la loca rapidez de la parte.
Por último hacer mención a los cortes 20 a 23 correspondientes a Guglielmo Tell. Mucho se ha hablado sobre la procedencia del tenor de cantar esta ópera. Por ahora tanto el tenor como su representante han manifestado que no se contempla en el horizonte esta situación. Destaca con claridad el corte 21 “O muto asil”, cantado con un legato de una categoría máxima. Es increíble la luz que desprende la voz del tenor en este fragmento, es realmente una maravilla y ya lo está ofreciendo en directo en los conciertos y recitales con grandioso éxito. El corte 23 “Corriam! Voliam!” aunque se echa en falta una voz de mayor peso para esta parte, está cantado con gran carácter y con unos agudos bastante espectaculares. Este último fragmento sí que no se espera que por el momento el tenor lo aborde en directo, ni siquiera en recitales, pero su prestación en estudio ha sido de gran nivel.
En conclusión, nos encontramos ante una joya discográfica donde podemos apreciar y en algún caso descubrir, un repertorio belcantista muy interesante por la belleza de la música y la dificultad de las distintas partituras, interpretadas por el tenor que mejor podía acometer tales escollos, imprimiendo su sello personal, el más depurado estilo y algo esencial en belcanto, una voz de gran belleza. Un gran homenaje a Giovanni Battista Rubini, a Giovanni David, al tenor contraltino, a una época dorada del canto y por lo tanto un gran homenaje al ARTE.
Un abrazo
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