No, nada fácil, siempre se encontrarán contraejemplos cada vez que se intente una definición.
Pero es cierto que la comedia musical clásica de los 40-50 (Berlin, Cole Porter, Gershwin) y sus herederas directas requieren un bailarín-actor-cantante de primera y -como dice Simon- hay que adaptar las exigencias vocales para que el/la sujeto no muera en escena.
La otra semana vi por TV Kiss me Kate de Cole Porter. No es de mis favoritas, tiene tres temas magníficos (entre ellos So I love with you ...
) y el guión es insoportable.
Los protagonistas tienen que bailar por todo el escenario, subir y bajar escaleras zapateando como Fred Astaire y Ginger Rogers, levantar la pierna hasta la nariz, y en la misma escena alternan: canto una estrofa - bailo - canto otra estrofa - bailo ... te cansás solo con mirarlo. Y hay que aplaudir ese talento múltiple, por cierto, aunque finalmente no haya taaanta demanda vocal.
Dicho sea de paso, los bises en esta especialidad se hacen cantando estrofas distintas de la misma canción. La versión comercial suele ser la "corta", para la escena hay más estrofas preparadas por si el público pide bisar.
Baci,
Maddalena