Según cartas escritas por Bellini durante el proceso compositivo de I Puritani, las funciones del estreno e igualmente correspondencia durante la versión que hizo de la ópera en que intervendría Malibrán en Nápoles, Rubini dió la famosa nota en todas las funciones parisinas y con gran éxito.
Por otra parte, acabo de repasar en una biografía del tenor Mario de Candia o Mario a secas, que acabo de citar antes, para confirmar que éste también daba la nota extrema en I Puritani.
De modo que en su época, por el tipo de técnica que manejaban los tenores de este repertorio, no era cosa extraña esas proezas.
Óperas que hoy no se cantan o muy poco, estaban llenas de re4, mi bemoles, mi naturales y no es de extrañar f4, no solo en el repertorio italiano, sino en el francés.
La segunda aria de Chapelou en Le Postillon de Longemeau tiene una nota extrema dificilísima, a saber un mi natural. Un salto al fa no estaba pegado del cielo: ver minutos 5:48-5:51:
https://youtu.be/8WODsv0FFlgRubini estrenó después de Il Pirata de Bellini, Gianni de Calais, Il Paria, Marino Falliero y Anna Bolena de Donizetti, Il talismano y Giovanna d´Arco de Paccini, Il Solitario de Persiani, Bianca di Belmonte de Luigi Rieschi, Malvina de Michelle Costa, Il Bravo de Marco Aurelio Marliani, Ernani de Vincenzo Gabussi, I Briganti de Mercadante, Ildegonda de Marco Aurelio Marliani, Malek Adel de Michael Costa y Falstaff de Balfe, donde no sabemos pero es de suponer, que la pirotecnia en favor de sus medios estaba a la orden del día.
Ahora no se cantan o en las pocas, abunda la tijera a las dificultades y como no se conocen, nadie se entera.
Antes de Il Pirata estrenó muchas ópera más, de modo que siendo más joven aún sus incursiones en las alturas debieron ser un paseo para él y fuente del interés de Bellini.
En Oviedo hace poco un jovenzuelo ni se ruborizó por hacerlo:
https://youtu.be/3tQv3QcAAb0Además, de Rubini se explotaban sus otras características, pues no era un cantante no solo de agudos, pero ese es otro tema.