El otro día me saltó en YouTube un vídeo de Kaufmann cantando el Pourquoi me réveiller, y entre engolamientos varios, falsetes y esa afectación tan suya me angustió que se asfixiara y lo cambié por el Werther de Plasson, Kraus y Troyanos. Y que no hay color, qué quieren que les diga.

Es que comparar a Kraus y Kaufmann, además en Werther, es como comparar a Dios con un gitano -y perdón a los gitanos por lo políticamente incorrecto de esta frase hecha.

El otro día, mirando una entrevista en youtube con el tenor Chris Merritt, señaló algo muy curioso, respecto a que los ídolos, divos o portentos vocales, deben ser analizados como hijos de su tiempo y contexto respectivo.

Y citó el lugar común, de comparar los cantantes actuales con los del pasado, en cualquier época, donde siempre respecto de la generación anterior, quedan mal parados.

Además acotó y de casualidad, el caso de Kaufmann, de modo que el rubrica que dentro de veinte, treinta o cuarenta años, cuando ya no estaremos para confirmarlo o refutarlo, se escribirá que los cantantes de ese entonces, serán una basura a la par del germano.

Opinable.

No sé que pensáis vds. Yo acabo de escuchar esta Butterfly de Moffo y la verdad que ha sido una experiencia emocionante. Cierto que conforme a la costumbre de aquella época, aparece los llantitos que también encuentro en otras grabaciones de estudio - Tebaldi-Bergonzi DECCA - o el live de Caballé-Martí (o Marti, nunca lo he sabido bien) Una Butterfly de voz chiquita, como De los Ángeles, pero es tal al pathos de esta cantante, que logra transmitirnos un personaje de carne y hueso, con una clara diferenciación entre el acto I y el II en color y dramatismo. La recreación que hace en el acto II es para escucharla detenidamente. NO hay fragmento donde no ponga un sentimiento, una intencionalidad justa y precisa emocionantes. No sé si la cantó en directo o si rendía en teatro como en esta grabación. Puede que le pasara algo parecido como all Rigoletto de DFD...pero la labor de estudio está ahí, imperecedera. Ella ES italiana. Punto: dicción perfectísima y timbre carnoso y de una belleza en su centro que a mi me entusiasma. Una de las Grandes Butterlfly...creo.
El acto III...de reclinatorio. Punto.

Valetti: hace una auténtica recreación como Pinkerton: insolente y despreciativo ( acto I) amante (acto I) arrepentido desesperado (acto III) ¿el pero? la voz clara y chica que hace que la orquesta le tape y no logre crear un personaje con presencia acústica considerable...pero no puedo ni debo pasarme con la crítica, puesto que la labor que hace es estupenda y digna de admiración e incluso adhesión.
El cónsul de Renato Cesari de lo mejor que he escuchado. Secundarios, fantásticos, incluso el Tio Bonzo de Corena!!!

La liu, Mimí y Cio cio San de Moffo: fantásticas y si tuviéramos que elegir una de estudio, no habría ningún problema de elegir estas versiones ( en lo relativo a la labor de la cantante. La dirección de karajan es imbatible)

No puedo opinar de su Magda. No la he escuchado.

Aquí puede completar su descubrimiento mi estimado.

Nos cuenta si cambia la impresión o si la confirma:

https://youtu.be/LJklzt2hyNk

Por cierto, la Moffo tenía 24 años, Cioni, el tenor de la estupenda isla de Elba, 27.

No sé yo apreciar las diferencias en cuanto a prestaciones vocales y detalles interpretativos a no ser que me fije y analice minuciosamente las dos prestaciones ( cd y video) Lo que sí veo es que es un poco noñito su desempeño en los escenario....vamos...que prefiero el CD.

De las Grandes que he visto y he escuchado, que yo recuerde sólo tres tienen un desepempeño en teatro que iguala y complementa al desempeño vocal-interpretativo. A saber:

- Dame Gywneth Jones en DVD de Turandot con Bonisolli en 1987 y su Mariscala con Kleiber en 1979
- Callas como Tosca y los poquitos fragmentos mudos que hay de su Medea de 1961
- Kabaivanska como Tosca en el DVD con Sherril Milnes y Domingo - DG -

Al contemplar esos cuatro desempeños, veo a tres actrices de prosa que cantan...pudiendo medirse por gestualidad, movimiento escénico...saber estar en el escenario en definitiva, a cualquiera de las actrices que podemos tener in mente.

¿Hay más? por supuesto que sí...lo que pasa es que yo no he escuchado todo de todas. Sólo podría añadir a la Verret, con una Dalida en DVD con Domingo sensacional.
Al punto: a Moffo no la pongo - por lo que he visto en el DVD - en este club de verdaderas actrices de prosa que cantan....ni siquiera a Gencer ( por los videos que he visto de ella, como la Aida de Verona del 1963) Es una cantante actriz de primera, a juzgar su Mimí, Cio-cio-san o su Liu, pero viendo el DVD, no veo a una actriz en el escenario.Más convincente para mi es la Buterfly de la Arena di Verona de la Kabaivanska....por supuesto.


Digo como Bonisolli: dat is main opinion.

Pues ahora que lo dice, Anna Moffo sí tuvo una carrera -corta y discreta, pero carrera al fin y al cabo- como ACTRIZ en el cine que incluye, aparte de ultra famosos títulos operísticos, otras cintas que no lo son (algunas un poco subiditas de tono) y que explotaban la singular belleza de la cantante: https://www.imdb.com/name/nm0595666/

Prólogo de una de las tetralogías más interesantes de la historia discográfica. Merece la pena seguir el personal Loge de Wolfgang Winggassen -no puedo evitar pensar que se le queda corto el papel- dos gigantes enormes, Martti Talvela y Kurt Böhme y muy bien el Mime de Erwin Wohlfart, un cantante que no tiene el nombre que merece. otros nombres ilustres del reparto son Anja Silja, Vera Soukupova, Helga Dernesch y el inevitable Gustav Neidlinger.

En su momento, para algunos cándidos eran participaciones pornográficas, cuando no pasaban de ser eróticas a lo sumo.

Claro que nadie por ejemplo, se podía imaginar a doña Renata Tebaldi enseñando sus encantos, como lo hacía doña Ana Moffo en esas películas.

Al amigo Bonisolliano, aquí tiene la Lucia de la Moffo, para que complete su visionado:

https://youtu.be/YEGB-6Vik3A

Supongo que La Traviata sí la conoce.

Ya no lo puedo afirmar de forma categórica pero quizás esta fue mi primera grabación wagneriana y en su momento la compre por dos razones principales: el Daland de Martti Talvela y la batuta de Otto Klemperer. Casi cuarenta años después sigo pensando lo mismo.

Siguiendo con mi preparación para El Ocaso en el Real, me decidí a ver por fin este famoso documental, del celebérrimo Anillo de Solti. En 1964, la BBC se acercó al famoso (hoy desparecido) Sofiensaal de Viena para filmar la preparación y el proceso de grabación de El Ocaso de los Dioses. Aquí ponemos cara a John Culshaw, el joven y legendario productor musical, así como con el porte de todo un gentleman. También vemos a los asistentes, al propio Solti adentrarse en el legendario y señorial estudio de grabación, así como a los cantantes. Esta es una de las pocas ocasiones, aunque sea en la frialdad e informalidad (en los gestos de bromas de los artistas) de un estudio discográfico, de ver en vídeo, a estas glorias del canto interpretar no solo a esta obra maestra, sino a Wagner.

A lo largo del documental, narrado por Humpfrey Burton, asistimos a la grabación de escenas clave de la obra, al mismo tiempo que nos muestra imágenes de la Viena de los años 60. Incluso, se menciona el controvertido tema Hitler-Wagner-Fascismo, que Solti no suscribe, diciendo que aunque Hitler abusara de la obra porque le gustaba, no hay nada de fascista en la obra, ni en el personaje de Sigfrido. Para Solti, el Anillo es una única obra de arte, donde hay drama y música, a un nivel estratosférico, una experiencia catártica.

Los cantantes que aparecen en el documental (no se ve ni a Christa Ludwig, que hizo Waltraute, ni a Gustav Neidlinger, quien fue Alberich, ni a las nornas ni las hijas del Rin, todas futuras superestrellas) están en estado de absoluta gracia: desde un Gottlob Frick con una voz oscura, de ultratumba, de verdadero villano, que interpreta a uno de los Hagen definitivos. Uno lo ve y ve al hijo de Alberich. Una caracterización que contrasta con las expresiones jocosas y las sonrisas de Frick. Dietrich Fischer-Dieskau me hizo plantearme una cosa sobre Gunther: todos sabemos, y DFD lo reafirma en el documental, que Gunther es un personaje débil, una especie de Macbeth que aunque no tiene esposa, tiene un hermanastro que lo manipula en todo, y todo esto a la vez que es un rey. Me pregunto si un personaje tan gris e indeciso no se engrandece siempre que lo aborda un gran artista, haciendo que se le quede pequeño al artista. Aunque también me pregunto, si pese a ser protagonista, Gunther lo debería de cantar un barítono de reparto. Pero no: Wagner no lo pensó así, y además siempre es gratificante tener a una estrella en el rol, pese a todo. Ya en el Ocaso del Met de 1936 Schorr le da una autoridad que no tiene, o Fischer-Dieskau aquí le da, con su elegante y aristocrática voz, aquí pletórica, un toque de nobleza propio de un rey. Una delicia ver a Claire Watson como Gutrune, con esa voz deliciosa, juvenil, casi de mandolina, que pese a todo era una soprano dramática y que con Knappertsbusch filmó una Sieglinde de nivel. Watson hoy cantaría Brunilda, y tendría el mundo a sus pies. Wolfgang Windgassen, aquí aparece interpretando a Sigfrido, con ropa informal (para un señor de la época), alejado de las caracterizaciones que hay de él en el personaje en las fotos. Aunque su interpretación aquí es legendaria, me ha parecido que aquí el maduro cantante es quizá el punto más flojo (sin que esto baje de matrícula) de un reparto en plenitud. La voz sigue siendo fresca, juvenil, hasta lírica, además de su legendaria resistencia, pero al lado de un Frick aparece un poco en desventaja, como cansado. Aun así, emocionante y maravilloso en la muerte de Sigfrido. Y la más radiante del elenco, una Birgit Nilsson que en 1964 estaba en plenitud de facultades, un torrente vocal, brillante agudo, y un porte tan imponente como una auténtica vikinga. Nilsson siempre sorprende con su caracterización de Brunilda, una voz que se come a todas las demás, que las eclipsa. Muy gracioso el momento en que cuando canta "Grane, mein ross" aparezca un auténtico caballo, y tanto ella como toda la orquesta sonríe graciosa y tiernamente por la presencia del equino. Uno piensa, en que Grane es el gran ausente de puestas en escena del Anillo hoy en día. Magnífica la Nilsson en la terceto final del segundo acto y en la propia inmolación.

Para el final dejamos a Sir Georg Solti y la Filarmónica de Viena. Solti se muestra enérgico, vigoroso (atención a cómo agita los brazos al dirigir), como su lectura del Anillo, famosa por su opulencia, enérgica dirección, incluso su imponente violencia. Con Solti, el Anillo es una emoción fuerte, mucho más de lo que ya es, que deja al oyente en una catársis, un subidón de adrenalina. Entre la orquesta vemos a caras conocidas como Willi Boskovsky, famoso por dirigir a los Wiener en los Conciertos de Año Nuevo, o el mítico trompetista Helmut Wobisch, de nefario pasado nazi. En el documental también se ven los cuernos reconstruidos para la grabación, tras la pérdida de los modelos originales de Bayreuth en la Segunda Guerra Mundial. También se ve en un plano lejano, al maestro de coro Wilhelm Pitz, mítico maestro de Bayreuth. Del opulento Coro de la Ópera de Viena destacan las voces masculinas, que parecen unos guerreros tan vigorosos como elegantes. Con Solti la orquesta suena en estado de total gracia, posiblemente la mejor orquesta que haya interpretado esta obra, y desde luego la que mejor la ha grabado en estudio, junto a la del Festival de Bayreuth.

Mientras la orquesta interpreta el glorioso final, se pueden ver la seriedad final del equipo, tratando de contener la emoción, excepto en Culshaw que no tiene reparo en mostrar unos ojos húmedos. Y eso que en realidad el Anillo de Solti no acabó realmente aquí, sino con La Valquiria, que no se grabó hasta un año más tarde. Pero el documental parece mostrarlo como si fuera el último día de grabación del proyecto. Y tras el último acorde, la última nota, la cámara enfoca las cintas de grabación junto a una foto de Wagner, en absoluto silencio. No es posible sonido alguno tras ese tremendo final.

Un vídeo recomendable para quien aún no lo haya visto.

Justo estoy leyendo el Werther, en las primeras cartas cuando describe "Wahlheim" no podía quitarme de la cabeza a Kraus cantando "O nature..."

No sólo es políticamente incorrecto, el paralelismo es inexacto. Comparar a Kraus con Kaufmann es como comparar a Dios con Kaufmann -y perdón por la blasfemia.

He de reconocer que esta grabación -de la primera ópera que escuché compulsivamente en mis tiernos 16 años- tiene tres grandes alicientes: el Florestan de James King, de referencia; la Leonora de gwyneth Jones, muy interesante; y el Don Fernando de Martti Talvela, de gran majestuosidad. Tampoco puedo olvidarme la deliciosa Marzelline de Edith Mathis. Bien sin brillar en exceso el Rocco de Franz Crass y en términos generales una versión excelente de la ópera. Fidelio, mi primer paso.