EL LIBRETOA menudo se ha hablado del libreto de
Béatrice et Bénédict como de una chapuza monumental, incluso en wikipedia lo he leído.
Es una de esas tonterías que se repiten papagáyicamente sin que nadie se tome la molestia en comprobarlas.
Lo cierto es que la ópera no pretende ser una adaptación fiel de
Mucho ruido y pocas nueces, más bien una versión libre,
un capricho dibujado con la punta de una aguja.
En la ópera
se trata de convencer a Béatrice y a Bénédict de que se aman. (Hector dixit)
Para ello, Berlioz se deshace completamente de la intriga paralela en Shakespeare (es decir, la de Hero).
Elimina al megavillano shakespeariano, el bastardo Don John, y sus maquinaciones por hacer parecer a la inocente Hero una guarrilla desvergonzada. Con ello, se suaviza bastante el carácter tanto de la propia Hero, como de su padre Leonato (que se vuelven personajes inocuos). El prometido de Hero, Claudio, casi desaparece en la ópera.
El elemento cómico de Shakespeare, encarnado en Dogberry, jefe de la policía, es transformado por Berlioz en el músico Somarone (
somaro quiere decir "burro" en italiano).
Se supone que este personaje es una parodia de Spontini. A mí me gusta verlo como una parodia con un siglo de antelación de Celibidache, quien se hartó de proclamar que la música de Berlioz era una basura y que él mismo podía demostrar, si le concedían media hora y un piano, que Hector no tenía ni pugnetera idea de armonía ni de contrapunto.
Somarone tiene dos escenas: en la pimera lo vemos ensayando su "sublime obra maestra", compuesta en honor de los futuros novios Héro y Claudio, con una caterva de músicos incapaces, los pobrecitos, de entender y apreciar su arte (una fuga bastante básica y pedestre, chúpate esa Celibidache).
En el segundo acto, lo vemos improvisando unos no muy inspirados himnos al vino.
Pese a todo, hay algo falstaffiano y
bon vivant en este bribón que nos lo hace simpático.
Uno de los supuestos fallos de la ópera es que Héro, y no Béatrice, es quien se lleva la música más bonita, pese a ser una figurante.
Ciertamente, tanto el aria de Héro
Je vais le voir (n°3), como su Nocturno
Nuit paisible et sereine (n°8), junto a su dama de compagnia, Ursula, son de una altísima fantasía.
Pero afirmar eso es simplemente no haber prestado atención a la música de Béatrice, sus duos con Bénédict (n°4 y n°15), su gran aria del segundo acto (n°10).
Algo que sí me parece un fallo arquitectónico, pero tendría que verlo en escena para determinar si funciona o no, es la colocación del aria de Béatrice (n°10) en el segundo acto, cuando se supone que es inmediatamente anterior al diálogo que precede al Nocturno (n°8) del primer acto. Siempre me ha parecido que hay demasiada música en medio, el Nocturno, la Siciliana del Entreacto, la Improvisación al vino de Somarone. Creo que se pierde la continuidad.
Pero en Shakespeare también hay cosas que sobre el papel no parecen de recibo y luego sobre las tablas funcionan de maravilla, o sea que…
Los personajes de la ópera de Berlioz son los siguientes :
Béatrice, la prota . Es una bicha, pero en el fondo maja.
Héro, su prima. Enamoradísima.
Leonato, padre de Héro y gobernador de Messina.
Bénédict, oficial que ama-odia a Béatrice.
Claudio, oficial que ama a Héro.
Don Pedro, general al mando de Claudio y de Bénédict.
Ursula, dama de compagnía de Héro.
Somarone, músico enófilo, megalómano y gordinflón.
La acción transcurre en uno de los paisajes más bonitos del mundo: Sicilia.