Se lo escuché a un "enterao" que le estaba dando la brasa a su señora (o similar) en la Maestranza, explicándole el Don Carlo que iban a ver:

"Normalmente Don Carlo tiene cinco actos pero aquí tiene cuatro porque han suprimido el acto polaco."

Juaaaaaas

Se referiría al acto de Fontblau

Igual es que el hombre quería ver Don Karlowsky.

Este mismamente...

http://www.youtube.com/watch?v=Wm7Jd1DB3wQ

Un amigo que entra en el salón en plena habanera de la Carmen de Bumbry:
"¿Esto es Georges Bizet o George Gershwin?"

Que somos muy list@s, porque l@s artistas están muy buen@s...
Fuente: sala de profesores.

Vengo de un Viaggio a Reims en el cual un señor se fue en el primer intermedio gritando que no le gustaba porque era una "ópera para chicos"
Hay de todo en este mundo

Hace un mes pusieron en cines Anna Bolena y como siempre me pasa, los días siguientes estoy tarareando una o varias melodías que se me quedan.

Pues en uno de esos días le digo a mi jefe: "Ya he contestado el correo de las zuburbas sopresnóbilas y te lo he mandado a ti con copia inicua".

Menos mal que, como es habitual, no me hizo mucho caso y ni se coscó.

Esto me recuerda unas indicaciones de un amigo a otro para que el segundo identificase a un actor:
"Sí, cono, ese actor que siempre hace de negro en las películas".

Vaya por delante que considero que vuestras madres vierten opiniones rebosantes de sentido común y desde un punto de vista estrictamente pragmático irrefutables.
Yo añadiría otro tópico : Por qué las canta todas Placido Domingo , ¿es que no hay más gente que se dedique a esto?
En mi humilde opinión, la ópera se va amando poco a poco.
¿Quien me iba a decir a mí que me iba terminar gustando Wagner ? Y Tannhäuser me gusta más que comer con los dedos.
La mayoría de la gente, no aficionada, suele pensar que la ópera son unos cantantes , normalmente orondos , que cantan de una manera exacerbada, como si estuvieran piraos.
Quizá lo que no suelen entender es que todo lo que cantan responde a una trama argumental y se quedan en lo aburrido que resulta estar escuchando a unos cantantes dos horas sin parar de proferir gorgoritos.

Mi hija, de ocho años, que me acompaña en gustos y conciertos y se ha "iniciado" en el placer de la ópera casi por "ósmosis", me acompañaba un día, de forma intermitente, visionando "Otello" (para ella por primera vez y desconociendo el argumento. Ya había visto Rigoletto, La Traviata y escuchado algo más). Como se acercaba la hora de una serie que quería ver en TV y yo con la ópera acaparaba la mejor pantalla, tras preguntarme varias veces si faltaba mucho para el final y ya impaciente, me dijo: "Mamá porque no se mueren estos ya de una vez".
Comprendí que era el momento de alternar el drama con la comedia.

¿Os acordáis de aquello que nos contaban en el colegio, sobre los generales romanos que, al desfilar triunfantes tras una batalla, llevaban en el carro a un actor que les iba diciendo "Recuerda que eres mortal" para que no se les subiera el éxito a la cabeza? Yo experimenté esa sensación hace poco.

No había pasado ni una semana desde que, en Madrid, me habían entregado el diploma al "Forero más instructivo" (gracias, una vez más). Le había ofrecido a mi mujer poner una ópera en vídeo y dudaba entre "Norma" y "Mefistofele". Como las dos son italianas, ella creía que serían parecidas, pero yo le advertí que los estilos son muy diferentes. Entonces me pidió que le explicase la diferencia: "Pero de manera que lo entienda, como hacías antes en entrar en el foro".

Deliciosa, tu señora