Spinoza escribió:
Gobbi como cantante no tiene ni medio pase, en eso, salvo Werther, casi todos estamos de acuerdo.
Gobbi como actor, podrá gustar más o menos, pero a mí se me antoja de un histrionismo facilón poco meritorio.
Lo que no tragaremos es que se nos "venda" a Gobbi como gran intérprete porque allí donde tenía que darlo todo era en el canto, no en la interpretación. Que se hubiera dedicado al cine, y a lo mejor le lloverían menos collejas.
Que hiciera un "carrerón" quizá se deba a los azares del espacio-tiempo, que lo colocaron donde había que estar, en el momento adecuado, por ejemplo, junto a Callas.
Resumiendo: que no cuela.
Por cierto, Gino, no entiendo (ni falta que me hace, allá cada cual, es por polemizar un poco más, si cabe) tu voto por su Falstaff. El rol, tomado en serio, al pie de la partitura, requiere un canto refinadísimo, lejos de faciles buffonadas "alla Gobbi". Recuerdo críticas muy duras de tu puño y letra hacia el Falstaff de Terfel, por ejemplo. Y ahora votas por el Falstaff de Gobbi. Mi no entender.
Les recuerdo que Gobbi sí cantaba. Tenía una voz que podría gustar o no gustar (aquí obviamente no gusta), pero no era mudo. Hizo una carrera durante casi cuarenta años en los teatros más célebres del mundo. Supongo que algo sabía de cómo cantar, aunque insisto en que reconozco sus limitaciones.
Gobbi sí era una gran intérprete. Su Posa, por ejemplo, es más refinado que el de un Bastianini, a quien se le entroniza en muchos altares por su prodigiosa voz, pero quien hace una interpretación mucho más plana que la de Gobbi, por ejemplo.
Su Iago, Scarpia, Boccanegra, Amonasro, son lecturas interesantísimas de esos papeles.
Su Falstaff, en manos de un director como Karajan, está lleno de sutilezas y no es un payaso como Spinoza trata de sugerir (en ciertas grabaciones en vivo, como la de Chicago con Serafin) Gobbi sí es un poco más payasesco, pero en la grabación de EMI no es así.
En cuanto a lo de la asociación con Callas, es falso atribuir a dicha asociación el éxito de Gobbi (o al menos exclusivamente). Cuando Callas empezó a hacerse conocida en Italia, ya hacía años que Gobbi era un barítono famoso. Por otra parte, si bien Gobbi grabó varias óperas con ella, si uno consulta las cronologías de las funciones de ambos cantantes se dará cuenta de que las veces que actuaron juntos EN EL TEATRO fueron poquísimas. El famoso trío Callas-Di Stefano-Gobbi sólo actuó UNA SOLA VEZ en el teatro, en una Traviata en Río de Janeiro a principios de los años 50s. Gobbi casi nunca acompañó a Callas en sus éxitos en La Scala (ahora solo me viene a la cabeza que actuaron en La Scala en el fracasado Barbero de Callas). Sus colaboraciones más frecuentes con Callas se dieron al final de la carrera de ésta, en 1964-1965, en las funciones de Tosca en Londres, Nueva York y Paris.
De resto, Gobbi hizo una carrera espectacular en todos los teatros del mundo él solito, sin contar con Callas.
Es que, por favor, entendamos que no estamos hablando de un barítono "ahí, más o menos", de tercera categoría, que grabó 2 o 3 operitas gracias a la protección de otro artista. Estamos refiriéndonos a un sujeto que fue, les guste a ustedes o no, una estrella, que fue (y es) considerado uno de los barítonos más importantes de la segunda post-guerra.