gakugeki escribió:
Pues bien divertido es el doblete chico de la Zarzuela. No pensaba ir, pero alguien me lo propuso y no lo lamento. Por supuesto que el dúo de la Reina Mora no lo cantan Conchita Supervía y Marcos Redondo, pero los textos de los Quintero y Arniches/García Alvárez tienen gracia, los actores están bien y la producción es resultona, con un divertido decorado articulado en Alma de Dios, que sólo falla al intentar representar el interior de una iglesia, pero en lo demás nos traslada a diversos ambientes con acierto.
A mí me gustó más Alma de Dios que Reina Mora. El teatro de los Quintero necesita, a día de hoy, demasiado voluntarismo para sostenerse en pie. Aún así, Castejón consiguió un momento poético de mucha altura en el romance del Niño de los Pájaros. Lo de Arniches y García Alvarez es otro mundo: "pura humanidad", como dice un amigo mío
. Arniches aporta el retrato de una sociedad y de unos tipos, y García Alvarez pone ese punto de locura y de surrealismo que redondea la función. Sobre todo si se cuenta con un cuadro de actores y con la sabiduría teatral que comandan Castejón y compañía. Incluso ese momento, "casi almodovariano", de la Canción húngara tuvo su punto de emoción 
.Y no, no cantaron ni Supervía ni Redondo
.
. Pertenece a La leyenda del monje. Las tentaciones de San Antonio es otra obra de Chapí, que no tiene nada que ver con ésta. Por un momento me hizo dudar de que fuera el clásico sainete con varios títulos, o subtítulos, del estilo de La verbena de la Paloma o el boticario y las chulapas y celos mal reprimidos 
