Interesante ópera Antony and Cleopatra, pero lejos de la inspiración de Nixon en China. Todo el motor de la ópera se centra en la orquestación (tonal) sobre la que descansa todo el peso narrativo, las atmósferas y situaciones dramáticas. La escritura para la voz resulta poco sugestiva, monocorde, aburrida. Sin embargo, aunque resulta un poco larga, la ópera capta la atención del espectador, pues está Shakespeare, por un lado y por otro, la fuerza e importancia de los acontecimientos históricos que narra, así como el interés que siempre ha suscitado el amor pasional entre Antonio y Cleopatra tantas veces tratado en cine y TV.
Julia Bullock realiza una impecable caracterización de la reina egipcia, sensual, atractiva, astuta, con el innegociable poder erótico, pero en lo vocal pena en los extremos con graves débiles y broncos y agudos que son puro grito. Buen equilibrio entre lo vocal y lo dramático el del Marco Antonio de Gerald Finley, sólido en lo vocal y atinado en su caracterización. A destacar amplia sonoridad y sólidos graves de Adriana Bignani Lesca como Carmión, el generoso volumen y apropiados acentos de Alfred Walker (al que ví en 2005 un Telramaund de Lohengrin en Salamanca y había perdido la pista) como Enobarbo. Más flojo Paul Appleby como Octavio César, que sí logró expresar con su canto el carácter taimado y sinuoso del personaje, pero su voz tenoril resultó demasiado liviana y débil, así como su carácter demasiado linfático para encarnar al que será primer emperador de Roma. Ver una ópera por primera vez y dirigida por su autor es ilusionante, qué duda cabe. Adams no defraudó como director, pero no pudo superar el escaso refinamiento tímbrico y falta de transparencia de la orquesta, de la que obtuvo, sin duda, entrega y sonido compacto. No se pueden negar, sentido narrativo y suficiente teatralidad a la dirección musical del compositor. Como siempre que el autor está vivo, la puesta en escena respeta y sirve a la obra y es hasta vistosa. La sucesión de escenas resultó dinámica y fluida con un muy hábil uso de paneles que se abren y cierran de diversas maneras y un vestuario para Cleopatra espléndido.
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_________________ "El canto como la belleza que se convierte en verdad" (Friedrich Schiller)
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