Debido a este extraño invierno que nos acompaña, he decidido ir a Islandia a sentir un poco el fresquito y ver algo de nieve. Un viaje parecido al de Zurich el año pasado. Había que aprovechar que no estaba activo el volcán Eyjacullajökullkeven, que deja una boina que si la ve Carmena no deja circular ni a las bicis.

Como hoy es festivo en Islandia (Fiesta del Arenque) fui al único sitio abierto de Reykjavik (aparte del puerto): el Teatro Nacional, cuyo nombre no pongo porque creo que no cabe en un renglón. Función de las 10:39 (es rara esta gente). Y como esta temporada no hay en el Real unas buenas Bodas (ni malas, como de costumbre), pues la masa de la sangre de uno se la pide a gritos de María Bayo. No me defraudó la función, a pesar de que no vienen las estrellas por aquí. Las últimas fueron Bobby Fisher y Javier Clemente.

Dirigía la orquesta el maestro concertador Helgoer Helgadóttir, que además es almirante de la Marina Mercante. Buen ritmo, con cierta tendencia a irse a estribor. Bien los metales y la percusión, pero menuda trompa llevaban los violinistas. Fígaro y Susana estaban encarnados por Steffan Asdísarson y Petra Sminoffsjön, voces ligeras y atractivas, y que se metieron perfectamente en el papel, ya que aprovecharon la función para culminar 19 años de noviazgo y casarse en el acto en el acto III.

Condes de Almaviva no hubo porque el sistema político del país lo impide. En su lugar pusieron al Burgomaestre y la Guardia forestal, que se llevan a matar y hacen lo posible por arruinar la felicidad de los que les rodean. Físicamente parecidos a Alagna y Yoryú. Luego abren la boca y la cosa cambia.

Hubo que acortar el cuarto acto debido a una previsión de ventisca. Ya en el hot..., en la cabaña urbana, con -13º, esperando que pase el temporal e intentando no intoxicarme con los efluvios sulforosos de las aguas termales que calientan la habitación.

Que envidia, Sr. Tip! Yo pensaba ir a la función del 31, camino de vuelta para Madrid, pero parece que el volcan ese, el Eyjacullationenormuskeven, va a "erupcionar" mañana y nos cambian la ruta....

Debido a este extraño invierno que nos acompaña, he decidido ir a Islandia a sentir un poco el fresquito y ver algo de nieve. Un viaje parecido al de Zurich el año pasado. Había que aprovechar que no estaba activo el volcán Eyjacullajökullkeven, que deja una boina que si la ve Carmena no deja circular ni a las bicis.

Como hoy es festivo en Islandia (Fiesta del Arenque) fui al único sitio abierto de Reykjavik (aparte del puerto): el Teatro Nacional, cuyo nombre no pongo porque creo que no cabe en un renglón. Función de las 10:39 (es rara esta gente). Y como esta temporada no hay en el Real unas buenas Bodas (ni malas, como de costumbre), pues la masa de la sangre de uno se la pide a gritos de María Bayo. No me defraudó la función, a pesar de que no vienen las estrellas por aquí. Las últimas fueron Bobby Fisher y Javier Clemente.

Dirigía la orquesta el maestro concertador Helgoer Helgadóttir, que además es almirante de la Marina Mercante. Buen ritmo, con cierta tendencia a irse a estribor. Bien los metales y la percusión, pero menuda trompa llevaban los violinistas. Fígaro y Susana estaban encarnados por Steffan Asdísarson y Petra Sminoffsjön, voces ligeras y atractivas, y que se metieron perfectamente en el papel, ya que aprovecharon la función para culminar 19 años de noviazgo y casarse en el acto en el acto III.

Condes de Almaviva no hubo porque el sistema político del país lo impide. En su lugar pusieron al Burgomaestre y la Guardia forestal, que se llevan a matar y hacen lo posible por arruinar la felicidad de los que les rodean. Físicamente parecidos a Alagna y Yoryú. Luego abren la boca y la cosa cambia.

Hubo que acortar el cuarto acto debido a una previsión de ventisca. Ya en el hot..., en la cabaña urbana, con -13º, esperando que pase el temporal e intentando no intoxicarme con los efluvios sulforosos de las aguas termales que calientan la habitación.

Estupenda crónica Sr. Tip.
Y escuche... ¿qué tal estuvo la escenografía/dramatúrgia?

Algo fría y aislada.
Alfredo era un empleado de una industria ballenera y Violetta era una... empleada del muelle. La acción transcurre en el iglú de ella. En vez del coro de adivinadoras y toreros hay otro de grumetes y limpiadoras de pescado. Cuando el barítono, mucho mejor que Vratogna, canta el "Di Provenza il mar il suol" baja un teloncillo con una pintura de un sol enorme, para que la gente sepa lo que es. Se cambian los carnavales de París por la celebración del solsticio de invierno. Las vestimentas, gabardinas de piel, en honor a joseluis.

Las vestimentas, gabardinas de piel, en honor a joseluis.

Debido a este extraño invierno que nos acompaña, he decidido ir a Islandia a sentir un poco el fresquito y ver algo de nieve. Un viaje parecido al de Zurich el año pasado. Había que aprovechar que no estaba activo el volcán Eyjacullajökullkeven, que deja una boina que si la ve Carmena no deja circular ni a las bicis.

Como hoy es festivo en Islandia (Fiesta del Arenque) fui al único sitio abierto de Reykjavik (aparte del puerto): el Teatro Nacional, cuyo nombre no pongo porque creo que no cabe en un renglón. Función de las 10:39 (es rara esta gente). Y como esta temporada no hay en el Real unas buenas Bodas (ni malas, como de costumbre), pues la masa de la sangre de uno se la pide a gritos de María Bayo. No me defraudó la función, a pesar de que no vienen las estrellas por aquí. Las últimas fueron Bobby Fisher y Javier Clemente.

Dirigía la orquesta el maestro concertador Helgoer Helgadóttir

Segunda escapada que no me llamas. En esta tenía especial interés.